El Grupo CTS-1024 realiza un estudio piloto gratuito de investigación poblacional sobre la condición física del PAS/PDI y sus familiares que culmina con transferencia directa de los resultados a los usuarios: “Nos basamos en datos para que el esfuerzo que hacen no quede en el aire”.
Lo ha expresado el investigador de la UAL, Enrique García Artero, de manera clara: “La filosofía que hay detrás de ‘UAL Healthy’, como en cualquier otro ámbito, es que disponer de una mayor información te lleva a tomar mejores decisiones; hay que cuidarse, comer bien, hacer ejercicio, pero para encaminar bien los esfuerzos es preciso saber en qué punto estas, y eso es justo lo que facilita este estudio”. Director del Grupo de Investigación CTS-1024 Sport Research Group, que es el que se ha puesto manos a la obra, ha precisado “pretende fundamentalmente monitorizar el estado de la condición física y salud de los ‘trabajadores UAL’, empezando de manera piloto este año con PAS y PDI”. Cualquier miembro de estos colectivos puede beneficiarse de la iniciativa, con el único requisito de solicitar una cita previa en el correo cts1024@ual.es, siendo atendido en el Edificio Central, despacho 0.19, ubicación previa de Internacionalización y del Rectorado.
“El principal beneficio”, en palabras del propio García Artero, “es realizar una evaluación muy a fondo, exhaustiva, realizada en apenas unos minutos, y pocos días después se le da un informe individualizado en el que se cuenta de manera muy gráfica y por colores cómo está, el índice de masa corporal, la presión arterial, la condición física, el perímetro de cintura… indicándoles con esta codificación de colores en qué sentido va bien y tiene que mantenerse, y en qué sentido va mal, en amarillo o rojo, y tiene que pensar en mejorar, que en definitiva es la clave”. Y es que la mayor preocupación a la hora de poner en marcha el proyecto no es otra que “fomentar el estilo de vida saludable en toda la comunidad universitaria”. En esa línea, se ha ampliado al entorno de cada usuario: “Queremos darle el mayor alcance posible, porque nuestro objetivo es cuidar de la salud de los trabajadores, y a ellos les interesa mucho la salud de sus seres queridos, así que se ha invitado a cualquier familiar directo a hacerse también el estudio”.
El apoyo del círculo más cercano es clave para la consecución de objetivos: “Está demostrado y se sabe que en casos de obesidad infantil, por ejemplo, el ambiente de casa, lo que se come y si se hace ejercicio, son fundamentales, o a la hora de dejar de fumar, algo más fácil si se cuenta con el apoyo del entorno”. Involucrar a las personas con las que se comparte la vida incidirá en que se logren los objetivos: “A partir de la información que le facilitamos, se pueden poner unas pautas para que la persona pueda orientar mejor sus esfuerzos en todos los sentidos, peso, grasa, presión arterial… si no tienes unos indicadores claros no sabes si estás trabajando bien o si tu esfuerzo queda en el aire, así que nosotros nos vamos en los datos y en la evidencia”. Se trata, por lo tanto, de un modo de “trasferencia de investigación directa y real, ya que los participantes tienen su primer efecto sobre su vida con el informe, investigación-acción”.
Se cumple así con una de las máximas de la Universidad de Almería en un estudio que mira al frente: “Ahora es transversal, en el sentido de que para darnos a conocer evaluamos una sola vez a los trabajadores y les orientamos su salud, pero la idea es, si conseguimos fondos, que se haga longitudinal o de seguimiento, para evaluarlos al menos una vez al año, pasar de un informe de una sola ocasión a un informe de progreso y enseñarles de forma gráfica cómo evolucionan todos los datos”. Además, es un modelo ‘exportable’: “Quién sabe si podremos llevarlo al resto de los trabajadores públicos, léase ayuntamientos, Diputación… ojalá que tenga un buen recibimiento”. Por ahora, en lo que va de mayo, 90 trabajadores de la UAL ya han pasado por las dependencias de un grupo que “no tiene más secreto que las ganas de investigar”.
El CTS-1024 arrancó hace un par de años con pocos investigadores seniors y gracias al Grado de Ciencias de la Actividad Física y el Deporte y al Máster en Investigación se ha visto poblado de “gente joven la que le gusta lo que hace el grupo y se pega para sus trabajos finales de carrera o máster o para su tesis doctoral”. Muy activo en convocatorias en las que participan, además se tiene presente que “los resultados no se pueden quedar en los ordenadores, sino que tienen que tener un efecto real en el contexto en el que lo se obtienen, en este caso la UAL y buscando que haya influencia fomentar la vida saludable en su entorno”. Se trata de un paso más allá del ‘UAL Activa’, nacido en el mismo grupo de investigación con Antonio Casimiro como impulsor y con la puesta en práctica del Servicio de Deportes: “No ha sido casualidad”.