Una última mesa redonda con Patxi López, Luis Rogelio Rodríguez-Comendador y José Ignacio Prendes aboga por el diálogo para unos “ajustes necesarios tras 40 años pero que no sean para satisfacer a los nacionalistas”. El taller sobre ‘Dirección de orquesta, banda y wind ensemble’ avanza entre sesiones prácticas y conciertos en el Apolo.
Han sido cuatro días de presencias notables de nombres propios tanto del panorama político español como del ámbito académico, promovidas por la UAL para ofrecer un seminario de alto nivel y de actualidad candente. El curso de verano ‘Reforma constitucional y crisis territorial’ ha llegado a su fin con un mensaje común por parte de PSOE, PP y Ciudadanos en torno al modo de afrontar una revisión de la Carta Magna de 1978, ya que las tres fuerzas dan la mano al diálogo y al consenso. Patxi López, secretario de Política Federal de los socialistas, ha recordado que son “firmes defensores de un estado constitucional” y al mismo tiempo entienden que “después de 40 años hay cosas que se pueden mejorar, cosas que se pueden corregir y cosas que tenemos que adaptar a los nuevos tiempos; incluso las generaciones que han nacido después de la aprobación de la Constitución tienen derecho a que de alguna manera su pensamiento, sus reivindicaciones y sus sueños también aparezcan en ella”.
La hoja de ruta que ha marcado es “primero hacer un diagnóstico certero, consensuado, de qué es lo que falla, dónde están los déficits, qué es lo que no se había previsto y ahora existe y tenemos que regular, y a partir del diagnóstico, poner en marcha el tratamiento”. Lo que no es aceptable, a su juicio, es “que se diga, para no acometer esta reforma, que no hay consenso: el consenso es la meta, ahora lo que hace falta es voluntad política para sentarse a hablar y en el camino buscar los consensos”. En clara vinculación con la crisis territorial, ha dejado claro que los cambios “no deben ser para satisfacer independentistas, sino para que la sociedad catalana entienda que hay un proyecto de progreso colectivo en el que todos nos podemos sentir cómodos, y eso debilita el pensamiento independentista”. Ha pedido ser “inteligentes” para reducir el apoyo de la mitad de los catalanes al independentismo.
Muy parecida línea ha expresado Luis Rogelio Rodríguez-Comendador, senador del PP por la provincia de Almería, al afirmar que “una reforma constitucional después de 40 años de vida podría ser factible, pero es necesario saber que se necesitan dos terceras partes del Congreso y dos terceras partes del Senado para aprobarla, que se disuelvan las cámaras y volver a votar esa reforma, y eso significa que hace falta acuerdo, hace falta consenso, y hace falta saber qué vamos a tocar y para qué, qué parte de la Constitución y con qué objeto, y eso necesita lógicamente el diálogo”. No hay modelo en el que fijarse, sino que “España debe mirarse en su propio espejo, en su historia, en su desarrollo constitucional, y a partir de ahí, prever cómo van a ser los siguientes años”. Hay que estudiar el modelo territorial “porque somos una gran nación”, ha argumentado, “en la que las regiones y comunidades autónomas deben sentirse cómodas dentro del marco constitucional sin que eso signifique ceder a exigencias de tipo independentista”.
En cuanto a José Ignacio Prendes, diputado de Ciudadanos por Asturias, ha ahondado en dicha lectura al definir a su partido como firmemente constitucionalista”, desde el que se reivindica “el pacto constitucional del 78, el pacto que hizo nacer esta Constitución bajo el que hemos vivido los 40 años de mayor éxito democrático y de mayor prosperidad que ha conocido España”. Es por ello que entiende que “lo primero que hay que hacer es reivindicar aquellos valores y hablar de que la historia de la Constitución del 78 es una historia de éxito, es importante decirlo ahora, en este momento, en el que algunos quieren impugnar todo el entramado constitucional”. En ese sentido, Ciudadanos cree que “el gran valor está en que no es de nadie y por tanto es de todos”. A construir en ese momento una España moderna sigue ahora la necesidad de “otro impulso también constitucional”, sabiendo que “la cuestión territorial tiene problemas evidentes y que lo que no hay que hacer es tocar la Constitución para contentar a los que no se van a sentir a gusto nunca porque su proyecto es impugnar el proyecto común que es España”.
Por lo tanto, y reconocida la idoneidad de la organización de este curso de verano por parte de la Universidad de Almería al “socializar cuanto más mejor el debate”, según Patxi López, y “meter a la gente joven en un asunto del que nadie en España se puede sustraer”, según Luis Rogelio Rodríguez-Comendador, José Ignacio Prendes ha sentenciado que la reforma constitucional “es para dar satisfacción al conjunto de españoles y no solo a una parte”. Precisamente se ha referido a los “tienen a la insatisfacción por bandera porque no se sienten parte de ese proyecto común”.
Taller de ‘Dirección de orquesta’
Por otro lado, continúa hasta este viernes un curso de verano con formato taller de larga duración al ocupar toda la semana completa. ‘Dirección de orquesta, banda y wind ensemble’ ha vivido este jueves una jornada muy internacional con la participación de los directores Seokwon Ryu, de Corea, Langston Hemenway, de Estados Unidos, y ‘el de la casa’, Juan José Navarro, a los que se suma durante los días previos el murciano José Miguel Rodilla, catedrático de Dirección de Orquesta del Conservatorio Superior de Música de Murcia. A las sesiones prácticas ya se han sumado una serie de conciertos, dos de ellos en el Teatro Apoyo y el último, este viernes, en el Maestro Padilla, que servirá de clausura al taller propuesto desde la Universidad de Almería. En los mismos la dirección corresponde a los alumnos.