La UAL ha acogido la final del IX Certamen de Proyectos Educativos en Ingeniería Química. Como novedad, ha habido un premio especial para el trabajo que mejor ha destacado el papel de la mujer en este campo.
Con el fin de despertar vocaciones entre estudiantes de Secundaria, Bachillerato y Formación Profesional, la Universidad de Almería ha celebrado la final del IX Certamen de Proyectos Educativos en Ingeniería Química. Hace nuevo años que surgió esta iniciativa, organizada por el Departamento de Ingeniería Química y la Escuela Superior de Ingeniería de la UAL, con el apoyo del Vicerrectorado de Estudiantes y Empleo y la Delegación del Rector para la Igualdad. Uno de sus objetivos es estrechar relaciones entre los centros educativos y la UAL, así como acercar la Ingeniería Química a dichos estudiantes.
Durante su desarrollo se realizan proyectos del ámbito de la Ingeniería Química, cada grupo de trabajo está compuesto por un profesor del área de ciencias o tecnología que actúa como tutor y un máximo de diez alumnos. La novena edición del certamen ha contado con la participación de 15 grupos que han presentado proyectos de diversas temáticas, pero con un nexo común, su preocupación por la sostenibilidad y la conservación del medio ambiente. Un total de 70 estudiantes procedentes de los centros educativos IES Nicolás Salmerón y Alonso de Almería, IES Mar Mediterráneo de Roquetas de Mar, IES Valle del Andarax de Canjáyar, CDPC Ciudad de Almería, IES San Isidoro de Cartagena (Murcia), EFA Campomar de Aguadulce y el Colegio Compañía de María, han mostrado los resultados más relevantes de sus proyectos mediante carteles, maquetas y exposiciones orales.
Los proyectos finalistas versaron sobre Biotecnología, Medioambiente, Energía y Alimentación. La final del certamen tuvo una reñida deliberación, ya que, dada la alta calidad de los trabajos presentados, la comisión evaluadora tuvo difícil emitir un justo veredicto. Desde la organización destacan y agradecen la alta participación y el gran entusiasmo mostrado por los alumnos y los profesores.
Como novedad, en esta novena edición del certamen ha habido un premio especial promovido por la Delegación del Rector para la Igualdad de Género para aquel trabajo que mejor destaque el papel de la mujer en el desarrollo de la Ingeniería Química. El trabajo presentado debía estar basado en un descubrimiento realizado por una mujer e incluir una reseña biográfica de la científica en cuestión.
Los premios han tenido una dotación económica entre los 500 euros del primer premio y los 100 euros del quinto. Los proyectos presentados se editarán un libro de actas con las memorias y los pósteres de todos los proyectos.
En cuanto a los premios, el primero ha sido para el grupo de estudiantes del IES Valle del Andarax de Canjáyar formado por Israel González Gallego, Ángeles López Godoy, Lorena Barragán Ginés y Gloria Martín Milán. El título de su proyecto ha sido ‘Extracción Del Limoneno por hidrodestilación y arrastre de vapor’.
El segundo premio ha sido para el IES Nicolás Salmerón y el proyecto ‘La tierra en miniatura. Estudio del CO2’ del grupo integrado por Julia García Artero y Alba Torres Gómez. El tercer premio ha sido para el proyecto ‘Un polímero súper absorbente hecho con piel de naranja para luchar contra la sequía’ del grupo del Colegio Compañía de María formado por Carla Gutiérrez Galván, Nerea Ruiz- Coello Martín, Mar Alarcón Jiménez, Marta González Rocafull y Mar Lladó Guillén.
El cuarto premio ha recaído en ‘C le van las vitaminas’ del grupo integrado por María del Carmen Cazorla Ruiz, Marta López Montoya, Ángela Viciana Jiménez y Nerea Nieto García, del IES Valle del Andarax. Y por último, el quinto ha sido para ‘Fitoextracción de metales pesados en la Sierra Minera-La Unión (Cartagena)’ de Alicia Aniorte García, Marta Fernández Carrasco, Delia García Mourran y Nicolás Hernández Moreno, del IES San Isidoro de Cartagena.
La novedad de este año, el premio especial ‘Mujeres en la Ingeniería Química’, ha sido para el grupo de Álvaro Angosto Martínez y Antonio Segura Criado, del IES Nicolás Salmerón y Alonso. En este caso el proyecto versaba sobre el Kevlar, poliamida sintetizada por primera vez en 1965 por la química polaco-estadounidense Stephanie Kwolek (1923-2014).