Es una de las conclusiones a las que se ha llegado este viernes, 12 de julio, en la última jornada del Curso de Verano de la UAL ‘Digitalización en la agricultura: tecnología, aplicaciones y cadena de valor’.
Mejorar la competitividad y hacer una agricultura más sostenible son dos de los objetivos de la digitalización del sector agrícola. Durante tres intensas jornadas la Universidad de Almería ha dado la oportunidad a cerca de 50 asistentes de ahondar sobre la situación actual y las perspectivas de futuro de la aplicación de la tecnología en este sector, a través de uno de los Cursos de Verano de esta edición.
En su última jornada el curso ‘Digitalización en la agricultura: tecnología, aplicaciones y cadena de valor’ ha contado con dos ponente internacionales. El primero de ellos ha sido Grigoris Chatzikostas, director del Departamento de Desarrollo de Negocios de BioSense, quien ha impartido la charla ‘Construyendo el ecosistema de la innovación digital’.
Chatzikostas está haciendo una síntesis de la digitalización de la agricultura en tres pasos:”el primero es vincular a los agricultores en el proceso; el segundo sería implicar a todas las personas de interés que formen parte de este sistema -desde empresas pequeñas a académicos a instituciones- y, por último, el tercero es asegurar que hay financiación para realizarlos y atraer a gente joven”. Además, ha valorado muy positivamente realizar un Curso de Verano con esta temática. “Porque lo más importante en este proceso de digitalización de la agricultura es motivar y hacer partícipes en acciones de formación a personas implicadas en este proceso”.
El segundo de los ponentes ha sido George Beers, de Universidad de Wageningen, quien lleva a cabo un proyecto europeo a largo plazo que incluye las políticas europeas. Beers asegura que en el tema de la digitalización e innovación agrícola “todavía queda mucho por hacer. Hay iniciativas y movimientos, pero están muy fragmentados por países y el objetivo de este proyecto es unir, dar un marco y relacionar estas iniciativas para hacer un verdadero movimiento a nivel europeo”.
Por su parte, los directores de este curso han realizado un balance positivo del mismo. Cynthia Giagnocavo ha destacado el hecho de que se haya nutrido de personas pertenecientes a diferentes cadenas de valor dentro del sector agrario y de haber contado con personas llegadas de varios puntos de la geografía española como Galicia o Valencia. Además ha agradecido a las entidades colaboradoras su apoyo y al Colegio de Aparejadores y Arquitectos Técnicos de Almería por ofrecerles su sede. “Estamos muy contentos tanto por el contenido como por la gran participación que ha habido”.
Por su parte, Jorge Sánchez ha querido destacar el haber llegado a casi los 50 inscritos y el perfil de los asistentes. “Hay gente de empresas, agricultores, estudiantes de Ingeniería Agrícola, de Ingeniería Industrial y de Informática, y es algo que nos satisface porque creo es muy importante que el curso se nutra de diferentes perfiles”.