La consolidada actividad de divulgación científica de la Escuela Superior de Ingeniería de la Universidad de Almería consigue la participación de casi un centenar de estudiantes de cinco centros de Secundaria, resultando ganadoras cinco alumnas del Colegio Agave gracias a un trabajo sobre ‘Producción de biodiesel a partir de aceite de oliva usado’.
El Departamento de Ingeniería Química ha vuelto a cumplir con su cita con los estudiantes preuniversitarios de la provincia, alcanzando ya la décima edición de su Certamen de Proyectos Educativos. De nuevo ha alcanzado una participación excelente en este año 2023, con 19 grupos y un total de 89 estudiantes procedentes de cinco centros: Stella Maris, Azcona, Sagrada Familia, Agave y El Argar. La final ha tenido lugar en la Sala de Grados de Ciencias de la Salud durante una tarde muy intensa que ha dado comienzo a las 15.30 horas y que se ha extendido durante casi cuatro horas cargadas de vocación, ilusión y algunos nervios.
Tras un primer bloque de exposición oral de proyectos finalistas se ha realizado una breve pausa, que ha dado pie al segundo bloque. Completado todo ese proceso, se ha producido la deliberación del jurado, que no lo ha tenido fácil, la entrega de certificados a todos los grupos participantes y la entrega de premios. Finalmente Mar López, Candela Huete, Marta Hernández, Alejandra Berruezo y Estrella Calvente, tuteladas por el profesor Pablo Jiménez, se han llegado el primer premio para el Colegio Agave. Su proyecto se titula ‘Producción de biodiésel a partir de aceite de oliva usado’.
A ellas han seguido sus compañeras de centro Clara de Tapia, Kira Garankina, Elena Corral, Carmen Domínguez Sáez y Raquel Cassinello, tuteladas por la profesora Lourdes Díaz, que se han alzado con el segundo premio gracias a su trabajo ‘Producción de bioetanol a partir de biomasa escolar como fuente de energía alternativa’. El podio lo ha completado un grupo del IES El Argar que han formado Pablo Adrián Pérez, Francisco Javier Picón, Ángel Rodríguez, Alejandro Tejedor y Miguel Ángel Rubio, con la tutela del docente Cristóbal López. Su proyecto ha versado sobre ‘Elaboración de indicador bio-orgánico universal de pH a partir de tintes naturales’. Se han concedido un cuarto y un quinto premio, de nuevo para Agave y El Argar respectivamente, por trabajos sobre la ‘Obtención de energía eléctrica a partir de electrólisis del agua’ y un ‘Filtro biodegradable para metales pesados’.
No ha quedado ahí, ya que en esta edición, además, se ha entregado un premio adicional para aquel proyecto en el que se trabajase sobre un descubrimiento de una mujer ingeniera Química, destacando por su papel en el desarrollo de este campo del conocimiento. Ha sido para un grupo del EEPP Sagrada Familia compuesto por Laura Barba, Irene Figueredo, Isabel Gómez, Raúl Lozano y Adriana Teruel, tutelado por Juana Muñoz, con el título de ‘Por un agua más limpia’. La dotación económica de estos premios ha estado comprendida entre los 500 euros del primero premio y los 100 euros del quinto, pero también es una gran recompensa para todos los grupos participantes que como resultado de esta edición del certamen se editará un libro de actas con las memorias y los pósteres de todos los proyectos presentados.
Cabe recordar que el Certamen de Proyectos Educativos de Ingeniería Química está destinado a estudiantes de 4º de ESO y 1º y 2º de Bachillerato de la provincia de Almería, y tiene el objetivo de estrechar las relaciones entre los centros de Enseñanza Secundaria y la Universidad de Almería. Además, procura promover el interés del estudiantado por las materias científico-técnicas en general y por la Ingeniería Química en particular. Consiste en que los alumnos realizan proyectos en ese ámbito por grupos de trabajo con un máximo de cinco integrantes más un profesor de su centro, que actúa como tutor. En el acto celebrado este miércoles en el campus, los grupos finalistas han mostrado un buen potencial al realizar la exposición oral de los resultados más relevantes de sus respectivos proyectos. Se han abordado diversas temáticas, relacionadas con la energía, con la alimentación, con el medio ambiente y con la biotecnología. La organización ha desvelado una “reñida deliberación, ya que, dada la alta calidad de los trabajos presentados, la comisión evaluadora ha tenido difícil emitir un justo veredicto”. Ha destacado y, a su vez, agradecido, “la alta participación y el gran entusiasmo mostrado tanto por los estudiantes como por los docentes implicados”. Ha contado con la colaboración del Vicerrectorado de Estudiantes, Igualdad e Inclusión de la UAL.