El estudio, realizado junto a la Universidad Politécnica de Madrid, señala que la capital de Estados Unidos y la localidad española comparten la misma disposición de los edificios principales, la disposición de las 12 avenidas radiales y su sistema de calles.
La revista estadounidense Urban Planning and Development ha publicado recientemente un estudio realizado conjuntamente por el departamento de Ingeniería de Universidad de Almería y la Universidad Politécnica de Madrid que señala que el diseño de la capital de Estados Unidos, Washington D. C, es una copia del plan urbanístico de Aranjuez. El trabajo que ambas instituciones realizan desde hace tiempo en cartografía ha descubierto que ambas ciudades comparten la misma disposición de los edificios principales, la disposición de las 12 avenidas radiales y su sistema de calles.
“Descubrimos, afirmamos, y hemos conseguido justificar y publicar que cuando se crea la capital de los Estados Unidos, Washington D.C, tras encargar el presidente, George Washington su diseño a Thomas Jefferson y este al cartógrafo Pierre L´Enfant, la ciudad se basada en los planos de Aranjuez”, afirma Francisco Manzano, miembro grupo de investigación que ha descubierto este hallazgo. La idea del estudio surgió tras la visita de uno de los miembros del equipo de investigación a la ciudad estadounidense. A su regreso llegó convencido de que su diseño urbanístico era semejante al de Aranjuez, y comenzaron a trabajar esta idea, hasta llegar a su publicación en Urban Planning and Development.
En el estudio ha quedado demostrado que L’Enfant, “copia el plano de Aranjuez, lo pone a otra escala aprovechando el meandro que hace el río Potomac -copiando el meandro que hace el río Tajo- y haciendo la misma disposición de los edificios principales de la ciudad, la disposición de las 12 avenidas radiales de Washington y todo el sistema de calles trapezoidales de la ciudad estadounidense son el diseño de los jardines de la localidad española”.
Lo más difícil de este estudio, que ha llevado más de un año de trabajo, ha sido “justificar desde el punto de vista histórico, cómo se ha podido dar esa coincidencia y cómo se ha podido llegar a esa conclusión, además de su publicación en un revista científica”. Convencer a los americanos de que el diseño de su capital está copiado de un pueblo de España no ha sido una tarea fácil, de hecho les ha llevado casi dos años encontrar un editor que les publicase el estudio. “Siempre hemos topado con editores de la propia ciudad de Washington con lo cual ha sido muy duro. Para su publicación hemos mandado el artículo con otro título como si fuera una primera aproximación al diseño urbano de Washington y luego el propio editor se ha dado cuenta de lo que realmente queríamos decir: que Washington se parece a Aranjuez. No hemos ido de entrada con esta idea y ha sido lo que nos ha funcionado”.
La influencia de Versalles en el plan de 1791 de L’Enfant para la ciudad de Washington DC, es bien conocida. Gracias a este estudio ahora pueden verse las sorprendentes similitudes entre Washington y la forma urbana del Aranjuez. Por ejemplo, las ciudades comparten el mismo diagrama de dos grandes espacios rectangulares dispuestos en forma de L, en los extremos de los cuales se ubican, de manera análoga, los edificios emblemáticos: el Capitolio y la Casa Blanca en un caso, y el Palacio Real y la Iglesia de San Antonio en el otro. También hay conexiones entre algunas de las avenidas diagonales: entre la Plaza de las Doce Calles en Aranjuez y las 12 avenidas radiales desde el capitolio; y entre el tridente del Jardín del Parterre en Aranjuez y el tridente formado en el plano de L’Enfant por Pennsylvania Avenue NW, Maryland Avenue SW y Avenue H. En base a estos hechos, este documento investiga paralelismos que hasta ahora se han ignorado.
El estudio muestra que tanto L´Enfant como su padre pudieron ver el plano de Aranjuez (1771) en París, ya que ambos coincidieron con Manuel S. Carmona, el creador del diseño de Aranjuez, en la Real Academia de Pintura y de Escultura, en la que L’Enfant estaba estudiando antes de su partida a los Estados Unidos. También pudo haberlo visto Thomas Jefferson durante una visita a París en 1783, cuando se propuso la creación de una capital y él era un candidato para planearlo debido a su relación con George Washington. Además, el estudio recoge que Aranjuez ya era conocido por los políticos norteamericanos, puesto que Francia y España firmaron el Tratado de Aranjuez el 12 de abril de 1779 estableciendo que España intervendría a favor de los Estados Unidos en su guerra por la independencia.