La reconocida autora, afincada en Almería y que usa también los pseudónimos Ricarda Jordan, Elisabeth Rotenberg, Leonie Bell y Stephanie Tano para firmar sus obras, realiza un exitoso encuentro con los estudiantes, como actividad para profundizar en la creación literaria en alemán, pleno de cercanía y en el que desvela el entorno en el que escribe
Por la mañana, solo caballos, y, ya por la tarde, escritura. En Los Gallardos, la alemana Christiane Gohl tiene su lugar en el mundo, como muchos de sus compatriotas que han elegido la provincia de Almería para vivir. Pero ella… es especial. Ella no es Christiane ‘a secas’, sino que es Ricarda Jordan, Elisabeth Rotenberg, Leonie Bell, Stephanie Tano y, especialmente, por su impacto internacional, Sarah Lark. La literata que hay detrás de todos esos pseudónimos, que ha publicado con ellos y también con su nombre auténtico una prolija serie de libros, es una excelente comunicadora, abierta a la conversación, cercana y brillante, tal y como ha mostrado en un encuentro con alumnado que ha organizado el Centro de Lenguas de la Universidad de Almería.
Recibida en el Patio de Los Naranjos del campus por Carmina García y Esther González, directora y subdirectora respectivamente, ha quedado impresionada por la belleza del entorno, “aquí se podría estar de vacaciones”, ha dicho entre risas, “pero he venido a compartir una charla en español y en alemán con los estudiantes para que me conozcan mejor y se atrevan a realizar lecturas en mi lengua original”, ha añadido. Tras ser presentada en una abarrotada aula de las instalaciones del Centro de Lenguas por parte de su propia directora, ha tomado la conducción del evento el profesor José Miralles, que ha realizado una entrevista introductoria a la escritora, situando el contexto para facilitar más tarde la ronda de preguntas en alemán por parte del alumnado.
Y sí, Christiane Gohl ha conquistado el Centro de Lenguas con su simpatía, dando detalles sobre cómo es su día a día en su finca de Los Gallardos y el modo en el que afronta la creación literaria. Una apasionada de los animales, tanto como que su sueño frustrado fue estudiar Veterinaria, atiende por la mañana a sus más de treinta caballos, ya que ha convertido su casa en un refugio equino, a sus varias llamas y al resto de especies que acoge y cuida. Por la tarde se ‘empareda entre biombos’, en un espacio muy reducido en el que apenas cabe la mesa en la que escribe, buscando disciplina y encontrando método. La persona y la escritora, dos realidades convergentes, se ha abierto al numeroso alumnado participante, totalmente ensimismado con el discurso de una autora top.
Carmina García ha reconocido que es “un honor” contar con Sarah Lark, “una gran oportunidad al tratarse de una autora conocida y muy relevante en el panorama actual”. Ha manifestado su satisfacción de “poder brindar a los estudiantes y las estudiantes tanto del Centro de Lenguas como de la comunidad universitaria en general un evento tan especial como este”. Por último, ha expresado su agradecimiento a la escritora, por su amabilidad e interés en acudir a la llamada, y a su equipo de trabajo, que ha hecho posible una cita del más alto nivel y que marca la diferencia en formación idiomática. El título de la charla ha hecho referencia a Nueva Zelanda, un guiño al país en el que está ambientada su serie ‘Nube Blanca’, escrita entre 2009 y 2019, con una novela, “En el país de la nube blanca’, que iba a ser solo un libro, pero que al convertirse en best seller pasó a ser dos trilogías.
Christiane Gohl nació en 1958 en Bochum (Renania del Norte-Westfalia), y los responsables del cambio de la firma para sus obras literarias fueron sus editores alemanes, ya que era identificado como ‘la mujer de los caballos’ a causa de que había escrito más de 150 libros sobre equitación. De ahí el uso de pseudónimos, siendo los utilizados en sus novelas los de Sarah Lark y Ricarda Jordan. Su lanzamiento a la fama tiene como origen su paso por Nueva Zelanda, en el que se ambientan sus historias basadas en la cultura maorí y en la colonización. Escribe en alemán, pero ha sido traducida a múltiples idiomas y leída en todo el mundo, por lo que su presencia en el Centro de Lenguas de la Universidad de Almería ha sido todo un lujo para la comunidad universitaria.