La XVII edición del festival está dedicada este año a la ‘Música en la Cortes nobiliarias modernas’. El primer día del Seminario Gastronómico ‘El renacer del arte culinario’ ha estado dedicado al pan.
Junto a los conciertos que llenan de música las noches de Vélez Blanco, y que arrancaron el pasado sábado, se han iniciado este lunes, 24 de julio, las actividades de la Academia de Música con cursos de Canto, Canto Coral, Sacabuche, Orquesta Barroca, Viola de gamba y Música en las aulas.
Con un exquisito concierto en el Salón del Triunfo del Castillo de Vélez Blanco basado en la música de Monteverdi y otros compositores italianos del siglo XVII comenzó el sábado, 22 de julio, una nueva edición del Festival de Música Renacentista y Barroca de Vélez Blanco. La expresiva y hermosa voz de la soprano Erika Escribá, magistralmente acompañada por los Ministriles de Marsías, transmitió, con apasionada sutileza, emociones tan distintas como la ternura y el dolor, la alegría y la ironía, el amor o el desamor. Bellísima la interpretación de la Canzonetta spirituale sopra alla nana de Merula, o el Pianto della madonna de Monteverdi. Una hermosísima voz y un grupo de músicos que supieron hacer arte en la interpretación de cada uno de sus instrumentos. Un gran concierto que fue capaz de trasladar emociones y que contó desde los primeros momentos con el aplauso y el calor del público.
El domingo por la mañana el Festival de Vélez Blanco llenó con sonido de órgano el espacio renacentista de la Iglesia de Santiago. Miguel Bernal hizo gala de su gran calidad interpretativa con un recorrido desde los grandes compositores españoles de los siglos XVI y XVII hasta J.S. Bach y Kerll. Comenzó con una delicada Salve de Aguilera de Heredia, para continuar con algunas de las obras más significativas de Cabezón, Correa de Arauxo y Cabanilles. La última parte del concierto estuvo dedicada a J.S. Bach con una espléndida interpretación de Partite diverse sopra il Corale O Gott, du frommer Gott BWV 76, que finalizó con la trepidante Battaglia de J. K. Kerll.
Incorpora, una vez más, el Festival de Vélez Blanco la música de órgano, tan emblemática para la época renacentista y barroca y para la tradición musical de este pueblo, y lo hace contando con la maestría y sensibilidad artística que siempre derrocha el gran concertista Miguel Bernal.
También la Iglesia del convento franciscano de San Luis vivió una noche inolvidable con la música interpretada por la Schola Gregoriana Hispana. Música para el recogimiento, para el disfrute estético, para la búsqueda de la armonía y la paz. El conjunto, dirigido por Javier Lara, hizo una excelente interpretación de la música de la época del Cardenal Cisneros. Demostraron pericia y delicadeza en los Cantorales con voces perfectamente empastadas que brillaron todas ellas en las obras polifónicas.
Los Cantorales que en la noche del domingo se oyeron en el convento vieron la luz a comienzos del siglo XVI a impulsos del cardenal Cisneros, destinados a ser usados en la Capilla Mozárabe del Corpus Christi por él fundada, constituyen uno de los grandes tesoros documentales musicales hispanos.
Por otro lado, han comenzado paralelamente al Festival el Seminario Internacional de Historia y la gran novedad de este año, el Seminario de gastronomía denominado “El renacer del arte culinario”, organizado por la Universidad de Almería, que cuenta con la colaboración de la Escuela de Hostelería Almeraya.
En esta primera jornada el pan ha sido el protagonista con la conferencia ‘Panes del milenio, mil panes’ a cargo de “uno de os mejores panaderos de España, Antonio Portero Vergara, que cuenta en su haber con importantes premios nacionales”, ha comentado Tomás Lorenzana, codirector de los Cursos de Verano de la UAL en Enogastronomía.
Tras la charla han podido poner en práctica la teoría recibida y meter las manos en la masa para elaborar sus propio pan. “Se trata de un seminario eminentemente práctico, en el que los alumnos pueden elaborar alimentos que posteriormente degustarán”, ha explicado Lorenzana. En esta ocasión han degustado el pan con cava ‘Brut Nature’ de Laujar de Andarax, pues otro propósito del seminario “es trabajar con productos de la tierra”.