Los alumnos del curso de verano ‘Almería, un valle de hidrógeno verde’ han disfrutado de la oportunidad única de conocer desde dentro los desarrollos que se están investigando en este centro ubicado en el campus de la Universidad de Almería
Los 36 estudiantes que han seguido el curso de verano ‘Almería, un valle de hidrógeno verde’ han tenido la oportunidad única de conocer de primera mano cómo se pueden aplicar tecnologías solares a la propia producción de hidrógeno, una opción de alto interés para el futuro de esta alternativa energética sostenible.
Este conocimiento lo han adquirido durante la visita realizada a las instalaciones del Centro de Investigaciones de la Energía Solar (CIESOL) en el campus de la UAL, y de la mano de su director, José Luis Casas, catedrático de Ingeniería Química de la Universidad de Almería. Esta experiencia ‘in situ’ ha sido una de las más enriquecedoras del curso, ya que los estudiantes han podido conocer por dentro “un centro de investigación que, en sí, el propio edificio ya es un proyecto de investigación que integra el uso de la energía solar tanto en la parte de climatización como de producción energética, una visita muy interesante para los alumnos, por ver las diversas líneas de trabajo que llevamos”, ha explicado Casas.
El director del CIESOL impartió una primera charla explicativa previa a la visita en la que desgranó las líneas de investigación que se desarrollan en el centro, pero con particular atención a la más relacionada con la temática del curso de verano. “La producción de hidrógeno es una de las unidades en las que estamos trabajando muy activamente”, ha resaltado el catedrático, quien subraya que “siempre que aparece una nueva tecnología o un nuevo recurso la implantación es lenta, la ciencia lleva su tiempo, pero sin duda alguna se están dando pasos muy importantes en la integración del hidrógeno como un recurso, aparte de que su producción puede ser renovable, utilizando otras energías renovables, así que, yo creo que el hidrógeno, por supuesto tiene su futuro, y sin duda Almería va a estar presente en ese futuro”.
En su recorrido por el CIESOL, acompañados también por el director del curso de verano, Antonio Romerosa, los alumnos han podido conocer las unidades funcionales del centro de investigación, cuyo punto en común es el uso de la energía solar. “Aquí podemos encontrar líneas de trabajo como el tratamiento de aguas utilizando tecnologías solares, la regeneración de agua, la depuración utilizando microalgas que, al fin y al cabo también necesitan de la radiación solar, unidades que trabajan en la evaluación del recurso solar, que es imprescindible para poder llevar a cabo todos esos procesos solares, unidades que trabajan en la modelización y control de estos procesos, porque el uso de la energía solar está muy bien, pero tiene el hándicap de que es un recurso que está continuamente cambiando, por lo que tener una unidad de modelado y control para este tipo de procesos es muy importante”, ha ido explicando José Luis Casas. “También –añade- trabajamos mucho en la integración energética en edificio, en la optimización del uso de la energía dentro de edificios que están siendo alimentados con radiación solar a través de paneles fotovoltaicos, pero también a través de paneles térmicos”.
El curso de verano ‘Almería, un valle de hidrógeno verde’ ha sido uno de los más exitosos de la programación de cursos de este año, con dos ampliaciones de matrícula hasta llegar a las 26 personas inscritas. Uno de sus grandes fuertes, además de la visita de campo al CIESOL y el alto nivel de las ponencias, ha sido la incorporación de la perspectiva de la empresa privada, con varios ponentes procedentes de ese ámbito.