Antonio Manuel López ha clausurado este viernes, 8 de julio, el Curso de Verano ‘Novedades legislativas en el ámbito del sector público y del control externo’ en el que se ha puesto de manifiesto la necesidad de una legislación más específica y de calidad sobre transparencia.
Expertos en órganos de control externo de fondos públicos se han dado cita esta semana en Roquetas de Mar en el Curso de Verano ‘Novedades legislativas en el ámbito del sector público y del control externo’, un encuentro promovido por el Tribunal de Cuentas y la Cámara de Cuentas de Andalucía. En su clausura el presidente de la Cámara de Cuentas de Andalucía, Antonio Manuel López Hernández, ha destacado la necesidad que tienen los órganos de control externo de normativas más específicas que permitan que su función sea más eficaz. “Lo que tenemos que pedir a las administraciones es que la normativa sea mucho más clara y no presente demasiadas ambigüedades porque deja demasiados vacíos a la hora de poder aplicarla y evaluarla. Por parte de los ponentes se ha puesto de manifiesto la máxima de que no hace falta tanta normativa, hace falta que la que haya sea de más calidad y que se cumpla”. El director de la Cámara de Cuentas de Andalucía asegura que “es necesario establecer criterios comunes, establecer estándares que permitan a los distintos órganos de control poder evaluar mejor la transparencia”. Y añade que “tenemos que ser conscientes de todas esas limitaciones que existen a la hora de una evaluación efectiva”.
Limitaciones que, asegura, existen en la Ley de Transparencia y Buen Gobierno puesto que “necesitamos una normativa que esté bien definida, para que a la hora de aplicar la metodología del control de la transparencia, sepamos exactamente cuáles son los criterios que tenemos que seguir y en este sentido por ejemplo, se puso de relieve que faltan unos indicadores claros que puedan permitir evaluar si se está cumpliendo o no el principio de transparencia y que la ley en ese sentido no facilita la cosa”. Por tanto, “es necesario establecer criterios comunes, establecer estándares que permitan a los distintos órganos de control poder evaluar mejor la transparencia”.
Otra de las conclusiones a las que se han llegado durante el curso ha sido “la ausencia de una cultura de la transparencia en el ámbito de la ciudadanía y la necesidad de potenciar una educación y fomentar una formación mucho más amplia en relación con todos estos temas”.
El curso, que se ha celebrado en el Castillo de Santa Ana, surgió con la idea de aglutinar un conjunto de aspectos que tienen que ver con la nueva ley de Procedimiento Administrativo Común, con la Ley de Transparencia o normativas relacionadas con la racionalización de las administraciones locales, con la administración electrónica, con la modificación de contratos. Aspectos que tienen una incidencia directa en el control de los fondos públicos. Durante el mismo se ha realizado un análisis y revisión desde una perspectiva crítica y con profundidad sobre las implicaciones que estos temas están teniendo y van a tener en las administraciones públicas. Un curso que a juicio del presidente de la Cámara de Cuentas de Andalucía, que “ha tenido una aceptación muy buena por parte de todos. Ha venido gente de toda España, de órganos de control, de universidades, de ayuntamientos, y creo que la valoración que podemos dar del curso es muy interesante y muy aceptable”.