En ella expertos han puesto de relieve la importancia de esta enfermedad tanto en el aspecto preventivo como del tratamiento y cuidados de enfermería. La hipertensión arterial afecta al 30 por ciento de la población mundial.
Con motivo del Día Mundial de la Hipertensión Arterial, que se celebra desde 2005 cada 17 de mayo, la Facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad de Almería ha organizado una mesa redonda junto al Hospital Universitario de Poniente, la Sociedad Andaluza de Hipertensión Arterial y Riesgo Vascular, el Vicerrectorado de Deportes, Sostenibilidad y Universidad saludable y la Asociación Renal del Poniente Almeriense, que ha puesto de relieve la importancia de esta enfermedad tanto en el aspecto preventivo como del tratamiento y cuidados de enfermería.
“Esta actividad está enfocada a los estudiantes para que mejoren su formación en hipertensión arterial. La Facultad siempre organiza este tipo de actividades para que el alumnado mejore su formación con profesionales externos que están en el día a día en la práctica profesional», ha explicado el decano de la Facultad de Ciencias de la Salud, Gabriel Aguilera.
La hipertensión arterial (HTA) es una enfermedad que se presenta cuando se eleva la presión arterial en forma sostenida por encima de los valores considerados normales. Habitualmente no da síntomas, por este motivo se la considera el ‘asesino silencioso’. Si no se trata correctamente puede conducir a complicaciones serias como un ataque cardíaco o un accidente cerebrovascular. Es el principal factor de riesgo para padecer enfermedades cardiovasculares, especialmente enfermedad coronaria y enfermedad cerebrovascular, pero también para la enfermedad renal crónica, la insuficiencia cardíaca y la demencia.
A pesar de la disponibilidad de tratamientos efectivos, la hipertensión sigue siendo el principal factor de riesgo de muerte y discapacidad en todo el mundo. Los datos de 204 países y territorios informados en el reciente estudio encontraron que la HTA representó 10,8 millones de muertes.
“Al no doler, no sentirse, la población no mide su presión arterial. El problema es la concienciación ciudadana entre pacientes para que se midan la presión arterial», ha explicado Adoración Martín, nefróloga. Pero no solo se trata de los pacientes diagnosticados. Para prevenir esta enfermedad se recomienda a partir de los 40 años «ir a la farmacia, al centro de salud o usar algún tensiómetro en casa para medir la tensión. También hay que hacerse una analítica anual y si la persona tiene factores de riesgo (ser obeso, diabético, tener antecedentes familiares de hipertensión o de insuficiencia renal o cardiopatía, no practicar ejercicio o comer mucha sal) tienen que hacerlo de forma más habitual como una vez cada uno o dos meses. Si eres hipertenso, sí hay que tener un control exhaustivo».
La sal es una causa frecuente de hipertensión. “Los españoles tomamos tres veces más sal de la recomendada, por eso es importante que los padres acostumbren desde pequeños a sus hijos a comer sin sal. Es uno de los mejores regalos que les van a hacer en la vida. Además, es recomendable evitar comer grasas y hacer ejercicio físico».
Laura Casuso, enfermera, ha explicado que la hipertensión “es una enfermedad que por desgracia está cada vez más en aumento y que al ser una enfermedad silenciosa es difícil diagnosticarla porque el paciente no se mide la tensión. Vamos a hablar sobre cómo detectar esa hipertensión y los métodos que tenemos tanto para controlarla tanto con su medición como a través de la alimentación. Y la importancia de la enfermería a la hora de ayudar al paciente a vivir con esa enfermedad».
Por su parte, la enfermera Alba Serrano ha explicado la ayuda que les prestan a estos enfermos los profesionales de enfermería. “Les ayudamos dándoles una serie de recomendaciones y llevando un control sobre ellas porque, al fin y al cabo, no es algo que se cure de un día para otro. Hay que trabajar mucho con ellos porque muchos pacientes al principio no acatan todas las recomendaciones y hasta que no ven que el problema es real no empiezan a asumir su responsabilidad con la alimentación y el tratamiento farmacológico».
La HTA afecta a más del 30 por ciento de la población adulta mundial. En España, según la Sociedad Española de Cardiología, el 42,6 por ciento de la población adulta española es hipertensa. La prevalencia es mayor en varones (49,9%) que en mujeres (37,1%). El 37,4 por ciento de los hipertensos están por diagnosticar. En el grupo de hipertensos conocidos, toma tratamiento el 88,3 por ciento de los pacientes y solo el 30 por ciento tiene la presión controlada. Con estos datos, el control de la HTA en España sigue siendo bajo y se debe trabajar más en la prevención, detección y tratamiento de la HTA.