Lectura de un manifiesto sobre el escudo del pasillo central del campus de la Universidad de Almería con motivo del 31 de mayo, día de concienciación internacional que este año se centra en las nuevas tácticas de la industria de la nicotina

El Manifiesto de la Alianza del Movimiento sin Tabaco pone el horizonte de 2030 para la consecución de la primera generación de jóvenes libre de tabaco, algo a lo que se le ha puesto voz en la Universidad de Almería. Lo ha hecho con la participación del rector, José J. Céspedes, que ha iniciado una lectura conjunta culminada por Magdalena Cantero, presidenta de la Asociación Española Contra el Cáncer en Almería, contándose entre medias con la participación de seis alumnos y alumnas del campus encabezados por Celia García, ganadora de la segunda beca predoctoral de la AECC para investigación. Esta fecha, el 31 de mayo, fue instaurada en 1987 por la Asamblea Mundial de la Salud precisamente como el Día Mundial sin Tabaco, con la intención de llamar la atención hacia lo que ya entonces consideraba una ‘epidemia’, la del tabaquismo, y sus efectos letales.

El foco de atención de este año 2024 se ha depositado en los jóvenes y en las nuevas tácticas de la industria del tabaco y la nicotina, buscando ser la plataforma para que este colectivo en todo el mundo inste a sus gobiernos a protegerle de las tácticas abusivas de los fabricantes, que se dirigen a los jóvenes para convertirlos en adictos. Los datos dicen que en todas las regiones del mundo los niños empiezan a consumir cigarrillos electrónicos a un ritmo superior al de los adultos, llevando a que nada menos que 37 millones de jóvenes de entre 13 y 15 años consuman tabaco. Ante ello, se pretende que los jóvenes den un paso al frente para denunciar bajo el hashtag #TobaccoExposed. La OMS ha recordado que el consumo de tabaco es la principal epidemia prevenible a la que se están enfrentando la comunidad sanitaria.

Este manifiesto leído sobre el escudo del pasillo central del campus habla de unión “en un propósito firme y decidido: erradicar el tabaquismo de nuestras vidas y de nuestra sociedad”. Aclara además que “esta Alianza para la creación del Movimiento sin Tabaco trasciende de una simple campaña, y atiende al llamamiento que desde la Declaración de Madrid 2023, en la conferencia europea ECToH, se hace a todas las personas, en especial a la juventud, de aunar esfuerzos para alcanzar el objetivo último de conseguir la Primera Generación de Jóvenes Europeos Libre de Tabaco para 2030”. Esto se define como “una revolución de conciencia” y como “un desafío contra una crisis de salud pública que impacta negativamente a nuestras comunidades por generaciones”, escrito así en el texto compartido con la comunidad universitaria.

Esa es la misión encomendada, para la que se establece el compromiso “de desafiar el statu quo que ha permitido que el tabaco y sus nuevos productos arraiguen en nuestra cultura”. Se añade además que el objetivo es, por lo tanto, “una Europa libre de la adicción y los daños del tabaco, fomentando un entorno donde el tabaquismo no tenga lugar en la vida de los menores”. La estrategia que se propone seguir es “educación e información que desmantele mitos, formar y revelar verdades sobre el tabaco y sus nuevos productos, movilización para influir en la política y apoyo activo para aquellas personas que buscan liberarse de la adicción”. El manifiesto a ese respecto reconoce que “esta lucha requiere una acción concertada a nivel individual, comunitario y gubernamental”.

La Asociación Española Contra el Cáncer anima a las instituciones a que se adhieran a este movimiento, bajo el nombre de ‘Proyecto Zero’, para formar y proporcionar herramientas de pensamiento crítico y liderazgo social a jóvenes de entre 15 y 21 años que estén dispuestos a liderar el Primer Movimiento de Jóvenes Sin Tabaco para conseguir el año 2030 la primera generación de jóvenes que no haya fumado nunca antes de los 18 años.

Se ha lanzado una convocatoria por redes sociales (19 de marzo) para que los jóvenes interesados en participar en el movimiento se apunten. Hasta ahora se han apuntado más de 500 jóvenes y más de 900 instituciones se han adherido al Movimiento. Se seleccionarán 60 jóvenes en toda España para ser los primeros líderes del movimiento.

El Proyecto Zero nace ante el incremento exponencial del consumo de nuevos productos por parte de los jóvenes. El consumo de tabaco tradicional se estanca en el 20% y el de nuevos productos se eleva al 50% duplicándose en muy poco tiempo. Son productos no inocuos para la salud y generan adición siendo la puerta de entrada al tabaco tradicional. La sensación de la no existencia de riesgo por parte de los jóvenes es preocupante, pues el 26% creen que los riesgos del tabaco se exageran frente al 36% que lo cree respecto de los nuevos productos. 51% no le importa salir con amigos que fumen y 71% no le importa salir con amigos que vapeen.

Por eso se quiere que el movimiento nazca de los propios estudiantes y nada mejor que en la Universidad, con el fin de que sea el motor de la nueva generación de jóvenes sin tabaco en la provincia.