A partir del próximo enero las actividades continuarán con cine fórum, y acciones de concienciación en la Reserva Natural de las Albuferas de Adra y en el Paraje Natural Karst de Yesos de Sorbas.
Un total de 55 voluntarios de la comunidad universitaria almeriense realizaron una actividad de Voluntariado Ambiental en Sierra Nevada denominada, “Mantenimiento y Naturalización del sendero micológico Serbal- Fuente de Paredes”, la semana pasada. Se trata de una actividad enmarcada en el proyecto Ecocampus, desarrollado por la Universidad de Almería y la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio de la Junta de Andalucía.
Las actividades estaban orientadas a poner en valor la Sierra Nevada almeriense, a través de la naturalización del sendero citado que discurre por un pinar de repoblación. Entre todos plantaron 40 encinas, colocaron 10 cajas nido, pintaron huellas de animales para señalizar el sendero y se hizo una limpieza del entorno. El objetivo principal de la actuación voluntaria fue favorecer el establecimiento de un bosque mixto, con cabida a especies mediterráneas como la encina, favoreciendo su biodiversidad y la resiliencia del medio ante situaciones adversas derivadas del cambio climático.
Los voluntarios también marcaron con GPS cada plantón y las cajas nido instaladas para poder hacerles un seguimiento posterior y evaluar la eficacia de los trabajos. Además, le pusieron un nombre a cada encina para evocar que cada una de esas encinas tendrá una vida diferente, pero que juntas conforman, sin saberlo, el bosque Ecocampus.
A lo largo del sendero y de forma dispersa, se pintaron huellas de animales en los tocones de pinos, que cortaron hace unos años en labores de clareo para sanear la masa forestal y disminuir su potencial como combustible, con la idea definir su trazado de una forma divertida. Se espera que todo ello contribuya a dotar al sendero de un aliciente más para todas las personas que lo recorren, bien sean buscando setas, dando un paseo para bajar la comida tras un día de campo, o buscando la cabaña del duende Nevadensis, fábula que se refleja en un cuento infantil inspirado en la zona.
Para finalizar la jornada, se visitó el Centro de Guadalinfo de Abla, donde se ubica el Punto de Información Micológico, y donde cada voluntario recibió una guía de Setas Comestibles de Andalucía de parte del Ayuntamiento en agradecimiento a la contribución en la mejora ambiental del sendero serrano que es, objeto anual de recorrido por parte de los asistentes a las Jornadas Micológicas que se celebran cada año en Abla.
A partir de enero las actividades continuarán con un cine fórum sobre la cautividad de los cetáceos, dos acciones más de voluntariado en el Parque Natural Sierra de María Los Vélez y el Paraje Punta Entinas Sabinar, dos acciones más de sensibilización en la Reserva Natural de las Albuferas de Adra y en el Paraje Natural Karst de Yesos de Sorbas, y se continuará con la grabación del programa radiofónico que gracias a Radio UAL se está realizando dentro del proyecto.