El dato general de participación ha confirmado el éxito, con más de medio centenar de trabajos presentados, pero sobre todo la relevancia del III Concurso de Microrrelatos sobre Emprendimiento ha estado en los detalles. Los ha facilitado Jorge Tarifa, su coordinador junto a Carlos Cano, quien ha explicado que “la novedad de este año es que la procedencia ha tenido una gran diversidad respecto de los centros y las facultades”. La mayor tasa de inscripciones la ha tenido la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales, con 17, y ha habido incluso algún texto proveniente de la Escuela Internacional de Doctorado. Además, de los 52 escritos totales ha habido 43 realizados por estudiantes, y “se ha incrementado el impacto en el PDI y hasta ha habido del colectivo de antiguos alumnos”.
Este miércoles se ha llevado a cabo el acto de entrega de premios, presidido por Miguel Pérez, delegado del Rector para Estrategia, Comunicación y Coordinación, acompañado por los referidos Jorge Tarifa y Carlos Cano, director de Emprende UAL. La ganadora ha sido Victoria Moya, estudiante de segundo curso de Derecho: “Me gusta el emprendimiento, me enteré de esta convocatoria y la vi muy interesante, además de que me gusta participar en las oportunidades que nos da la Universidad de Almería. Para emprender se necesita utilizar ciertas cualidades similares a cuando se escribe, “imaginación, creatividad y un montón de cosas más, tiempo, ganas…”. Ha habido dos accésits, uno para Víctor Palomo y otro para Sofía Reos, que está finalizando sus estudios de Derecho y ADE: “El emprendimiento es algo que vemos durante toda la carrera y siempre me ha gustado muchísimo leer, así que al conocer este concurso pensé que era mi pequeño momento para ser escritora”. La inspiración para la historia ha sido su hermano.
Miguel Pérez ha enfatizado en que “para la Universidad de Almería el emprendimiento es algo innegociable y totalmente transversal a la institución”. Ha reconocido que desde el equipo de gobierno están “muy contentos por la alta participación y porque, además, es de casi todos los centros de la UAL, lo cual quiere decir que el emprendimiento no es algo que solamente se da en Empresariales, sino que es algo muy transversal que está en todas las actividades de la universidad y no solo en cómo nos planteamos nuestro futuro profesional, sino en el desarrollo de nuestra actividad profesional, allá donde estemos”. Ha felicitado a todos los participantes por su buen hacer y ha presentado la edición impresa de un libro, realizado por EDUAL, que recoge los microrrelatos presentados en las dos pasadas ediciones del certamen.
En cuanto a Carlos Cano, ha recordado que “hace tres años ya se estuvo dando la vuelta a una actividad diferente para Emprende UAL, aparte de la formación, de una parte de experiencia, aparte de otras muchas acciones que se realizan”. Fue entonces cuando llegó la propuesta de Jorge Tarifa, profesor de Organización de Empresas: “Se puso en marcha este concurso de microrrelatos con el objetivo de destacar también la diversidad de experiencias emprendedoras y de fomentar la escritura creativa en este ámbito”. A eso se une como misión “llegar a toda la comunidad universitaria, estudiantes, profesorado, PTGAS, para que se reflexione sobre la importancia del emprendimiento en la sociedad en la que vivimos y también generar nuevas ideas relacionadas con el mundo literario y empresarial”.
Ha destacado que en esta tercera edición “el lema es ‘Puentes hacia lo imposible’, que explica muy bien que el emprendimiento se alimenta de sueños que parecen imposibles, y que las personas, a través de sus reflexiones, de sus acciones, consiguen que los sueños se conviertan en realidades que son muy interesantes para el conjunto de la sociedad y para los propios promotores”. De hecho, en la propia convocatoria se puede leer que ‘los microrrelatos pueden explorar la fuerza de la imaginación para superar barreras, la audacia de quienes se atreven a intentarlo y la satisfacción de abrir caminos donde no existían’. La extensión máxima ha sido de 250 palabras y los tres premios han consistido en una dotación económica de 250 euros para el primero y de sendos kits de Emprende UAL para los dos accésits.
El jurado ha estado integrado por una quincena de miembros, que han sido: Ana Amezcua, responsable de Librería Picasso Almería, Daniel López, alumno del Grado en Finanzas y Contabilidad, Jorge Moreno, coreógrafo y coach, Juan José Tapia, profesor de Economía Aplicada, Lidia Domínguez, profesora de Derecho Procesal, Lola González, periodista, Luis Delgado, profesor de Didáctica de las Ciencias Experimentales, Luisa Cervantes, administradora de Evaluación de Recursos y Servicios de la Biblioteca ‘Nicolás Salmerón’, María Dolores Martínez, profesora de Derecho Penal, María José Estrella, profesora de Microbiología, Natalia Alonso, alumna del Doctorado en Ciencias Económicas, Empresariales y Jurídicas, Rebeca Tur, directora de ‘A Toda Vela’, Rosa Maldonado, responsable de Comunicación de ‘ASALSIDO’, Sandra Úbeda, alumna del Grado en Estudios Ingleses, y Sara Valverde, enfermera del Servicio Andaluz de Salud.
Han valorado según los criterios de Creatividad y originalidad, coherencia temática, calidad del lenguaje, impacto emocional y relevancia con el emprendimiento. Así, Victoria Moya ha ganado con su microrrelato titulado ‘Puentes Invisible’ por transformar algo tan efímero como la lluvia en una metáfora poderosa del emprendimiento y de los sueños que se atreven a tomar forma. Sofía Reos ha recibido un accésit por su microrrelato titulado ‘La Loca del Taller’, por reivindicar a quienes, desde la incomprensión y la etiqueta de la locura son capaces de convertir chatarra en innovación y futuro. Víctor Palomo, por último, ha sido merecedor del otro accésit porque su microrrelato, titulado ‘El Abismo’, es una metáfora intensa del emprendimiento como un puente construido con fracasos, intentos y decisiones valientes.
