Con éxito de participación, al superar el centenar de inscripciones, este tercer encuentro nacional organizado por la Universidad de Almería bajo los auspicios de la CRUE, “se hace más necesario que nunca” por el contexto de conflictos: “Hacer ‘campus de paz’, más todavía en estos tiempos que vivimos, con tantas tensiones internacionales de todo tipo”.
El Auditorio de la Universidad de Almería está acogiendo durante dos jornadas de trabajo, divididas en cinco sesiones temáticas, el III Encuentro Nacional de Comisiones de Convivencia Universitarias, un espacio plenamente consolidado y compartido por las universidades españolas para la reflexión y el intercambio de experiencias en esta materia. Se ha planteado bajo un enfoque participativo y colaborativo, haciendo valer su alta tasa de inscripción, con más de un centenar de participantes, para avanzar conjuntamente hacia una mejor gestión de la convivencia en el ámbito universitario. Así, especialistas y miembros de las comisiones de convivencia de un buen número de universidades están abordando estrategias de prevención y resolución de conflictos, la aplicación de procesos restaurativos y el papel de la mediación para construir entornos educativos más inclusivos y respetuosos.
Su intenso programa se ha iniciado con una bienvenida institucional presidida por el rector José J. Céspedes, en la que se ha contado con las intervenciones de Maribel Ramírez, vicerrectora de Igualdad,
Convivencia Universitarias de la CRUE y secretaria general de la Universitat Jaume I, y Roberto Álvarez, presidente de la Comisión de Convivencia de la Universidad de Almería. Tanto este último como la propia Ramírez forman parte de un comité organizador en el que también participan activamente Encarna Carmona, vicerrectora de Estudiantes de la UAL, e Isabel Ortiz y Bernardo Claros, secretaria general y defensor universitario respectivamente de la institución académica almeriense, reflejo del firme compromiso de la Universidad de Almería con la construcción de un clima aniversario de convivencia.
El rector ha descrito como “un placer y un honor” recibir a las más de cien personas inscritas “de todas las universidades españolas para participar en estas dos jornadas y tener la oportunidad de intercambiar experiencias e ideas, de hacer propuestas, de elaborar proyectos sobre un tema tan importante”. Céspedes lo ha entroncado con lo que supone la propia existencia de la universidad, al sostener que “la convivencia entra de lleno en los valores universitarios, los valores de justicia, los valores de equidad”. Por ello, ha enfatizado en que “para la Universidad de Almería es un motivo de satisfacción”, dada “esa idea de fomentar el compromiso con la convivencia, de establecer mecanismos de prevención de conflictos y herramientas que utilizar en caso de que puedan surgir estos conflictos para solucionarlos a través de la mediación u otras medidas de recuperación”.
Cristina Pauner ha agradecido el acogimiento de la Universidad de Almería y ha subrayado las palabras de José J. Céspedes sobre los objetivos implícitos en el encuentro. Se ha felicitado igualmente por la alta participación y ha manifestado que “son unos espacios cada vez más necesarios”. Ha recordado que “son unos órganos de reciente creación, desde el año 2022, en el que se aprobó la ley, pero las personas que las integran, con compromiso y dedicación, como suele ser el perfil universitario, hacen un trabajo magnífico”. Ha añadido que “se está teniendo otra cultura de la convivencia no reactiva, sino proactiva, y que al final en lo que repercute es en que hay un ambiente positivo en la gran comunidad universitaria en todas las universidades de España”. Se ha mostrado convencida de que “los participantes se animarán a contribuir y a hacer de este tercer encuentro otro éxito”.
Roberto Álvarez, por su parte, ha insistido en que “esto es más necesario que nunca, en estos momentos”, recordando el cambio de la normativa en 2022: “Tenemos una ley que obliga a todas las universidades a crear las comisiones de convivencia, ley que deroga un régimen disciplinario que venía de la época franquista, en el que el de tratar los temas, los conflictos, era totalmente diferente, y lo que dice esta norma es que hay que fomentar la resolución de los conflictos a través de la mediación facilitando otros instrumentos, y estamos ajustando el funcionamiento integral de la comisión con otros órganos de la universidad”. Álvarez ha explicado que su misión “no es solo intentar resolver mediante la mediación conflictos que puedan surgir, sino también de promover medidas para prevenir los conflictos, y que la convivencia en la universidad sea una realidad, hacer ‘campus de paz’, más todavía en estos tiempos en los que vivimos, con tantas tensiones internacionales y conflictos de todo tipo”.
El III Encuentro Nacional de Comisiones de Convivencia Universitarias se ha dividido en un programa muy completo, compuesto por ponencias, mesas de debate y espacios de reflexión, en los que se exploran estrategias de fortalecimiento de la convivencia con especial atención a la justicia restaurativa, la mediación y la construcción de redes colaborativas. Además, se están presentando los avances clave en el desarrollo de universidades restaurativas y en el trabajo de los subgrupos de la RedCCU. Por lo tanto, se cumple a la perfección con el espíritu de ser un espacio de intercambio imprescindible para quienes trabajan a diario en la mejora del clima universitario, y supone la oportunidad de fortalecer el trabajo en red y seguir avanzando en el desarrollo de formación especializada en esta materia. De hecho, se realiza un plenario de la Red como cierra de la jornada de este jueves, que contiene tres sesiones, con dos más para el viernes antes de la clausura, que correrá a cargo de Isabel Ortiz y Cristina Pauner.
