El director de ‘Al filo de lo imposible’ durante tres décadas pronuncia la primera de las conferencias enmarcadas en el programa de actos de San Isidro Labrador, patrón de la Escuela Superior de Ingeniería de la Universidad de Almería: “Posiblemente estamos en el comienzo de lo que se ha llamado la sexta extinción masiva de la vida en nuestro planeta”.
Rompiendo esquemas, la perspectiva humanista ha abierto las celebraciones de las titulaciones de ingeniería de la UAL con motivo de su patrón. Sebastián Álvaro, de hecho, se ha definido a si mismo de esa manera, como “un tipo humanista que ha leído mucho, que ha viajado mucho y que, sobre todo, ha tenido la suerte de sobrevivir en aventuras en las que podría haber muerto”. Personaje muy mediático y de enorme prestigio, al haber dirigido durante treinta años ‘Al filo de lo imposible’ en Televisión Española, su intención ha sido “hacer una especie de mirada interior sobre nuestro papel real en el mundo que habitamos hoy día” ello desde su propia experiencia viajera, así como realizar una severa advertencia: “Vengo a darle una vuelta al mundo para que la gente conozca de verdad lo que estamos perdiendo”.
Lo ha recibido Rosa Ayala, directora de la ESI, muy satisfecha de contar con un protagonista así, “una persona que tiene conocimientos prácticamente de todo y que los traslada a través de lo que ha vivido”, en el inicio de un apretado programa: “Esta conferencia está enmarcada en los actos del patrón de la Escuela Superior de Ingeniería, San Isidro Labrador, y además esta semana y la viene hay muchas actividades, como la puesta de insignias, un concurso de videojuegos o un concurso de Ingeniería Química”. Lo ha repasado al completo ante los asistentes y ha hecho un doble agradecimiento al Vicerrectorado de Comunicación y Extensión Universitaria, a través del cual se ha organizado la actividad con Sebastián Álvaro, y a Carlos Asensio, profesor del Área de Edafología y Química Agrícola, como el artífice de la misma.
Por su parte, Asensio se ha mostrado “encantado” de la aceptación de Sebastián Álvaro y ha instado a “aprovechar que venga aquí una persona que sabe tanto y de tantas cosas”. Es por ello que, a pesar de haberse incluido como evento del patrón, se ha diseñado “en sesión abierta para el público general y la comunidad universitaria, y por ejemplo ha venido alumnado de la Universidad de Mayores tanto de Roquetas como de Almería, una mezcla de todo, lo que es bueno para una jornada divulgativa”. El propio título de la conferencia, ‘Agricultura, medio ambiente y vida’, ideado por Carlos Asensio, ha tenido esa misma intención, “muy abierto y con una componente humanista clave de una persona muy comprometida”.
Sebastián Álvaro matizado que su planteamiento ha sido “hablar sobre todo de aventura, de la gran historia de la especie humana, que está ligada lógicamente a la agricultura; hace entre 5.000 y 8.000 años dejamos de ser una especie nómada para asentarnos, y eso lo hizo posible la domesticación de apenas unas especies agrícolas y también la domesticación de unos pocos animales, y a patir de ahí cambiaría la historia, lo haría de forma radical y sería el comienzo de la civilización humana hasta nuestros días”. Su primera advertencia ha sido que “probablemente moriremos de éxito”, explicando que “creímos que éramos amos del universo, de la tierra, de los mares y de los animales que habitan, como decía la Biblia, y de repente estamos descubriendo que somos una especie más interrelacionada con todas las demás, y hemos trastocado de forma peligrosa para nuestra existencia determinadas cosas que tienen que ver con la agricultura, con el aire que respiramos, con el agua que bebemos y a la que debemos el alimento”, textualmente.
Ha ido a más al sostener que, “en general la especie humana, y sobre todo en los últimos 250 años, ha cometido la torpeza de creer que vivimos en un planeta de recursos infinitos y gratuitos, y eso es lo que nos está llevando al cambio climático y todo lo que tiene que ver con nuestra propia existencia actual”. Ha continuado por la incertidumbre futura: “No sabemos, porque somos incapaces de predecirlo, qué va a ocurrir en un futuro inmediato, a cien o doscientos años, pero lo que sí sabemos es que contaminar el aire que respiramos y el agua de la que dependemos como mínimo es una torpeza, ese es el mínimo, porque si logramos trastocar el clima de nuestro planeta hasta hacerlo invivible, nuestra especie desaparecerá, así que posiblemente estamos en el comienzo de lo que se ha dado en llamar la sexta extinción masiva de la vida en nuestro planeta”.
Ha recordado que “los pobres siempre lo pagan todo, y lo pagan más”, aunque ha llamado la atención sobre que “por primera vez hay indicios de que empezamos a tomar conciencia de ello”. El mundo futuro irá marcado por las condiciones climáticas: “Si buena parte de la población africana o asiática tiene malas condiciones o no va a poder vivir en sus lugares de origen, vamos a tener migraciones como nunca jamás se han conocido en el planeta y será un fenómeno migratorio imparable; lo hemos visto con la guerra de Siria, tres millones de personas desplazadas, pero eso no es nada comparado con lo que se nos puede venir encima, y por eso es tan importante empezar a frenar, replantearnos desde el principio la relación del ser humano con la naturaleza”.
Ha puesto más ejemplos al respecto, como el de que “3.000 millones de personas dependen del agua de las montañas; el día que no haya, ¿de qué van a vivir?, esos son las preguntas que hay que responder”. Un claro peligro se sitúa en que “estamos perdiendo las grandes masas heladas, que son los grandes reservatorios de agua dulce del planeta, los paisajes de hielo, los de Groenlandia, los de la Patagonia…, el Ártico ya no se congela, la Antártida, en la que estuve el año pasado, tiene claros indicios de que está perdiendo ya hielo a marchas forzadas”. Lo lleva contando desde la propia experiencia de la observación directa desde hace años, autor de otras series televisivas de gran éxito como ‘De cero a ocho mil’ y ‘La tierra que heredamos’. Ha venido a contarlo de viva voz a la Universidad de Almería tras haber dejado atrás 350 documentales de más de doscientas expediciones, y a la vez que desarrolla el proyecto humanitario Hushé, “mi aldea”, en el noreste de Pakistán.