A la participación de un dúo de pianistas de prestigio internacional como la china Xin Wang y el alemán Florian Koltun tocando a cuatro manos, suma la gran novedad de sentar entre los músicos de la orquesta a diez personas del público.
Una experiencia inmersiva impactante y totalmente novedosa en el panorama nacional. Hasta una decena de personas de entre el público, las primeras diez que lo solicitaron cuando reservaron su asistencia al concierto, han podido vivir la interpretación de la Orquesta de la Universidad de Almería ‘desde dentro’. Esa ha sido la gran novedad de este año, con la que se abre camino y que ha terminado de redondear un rotundo éxito, fundamentado en el lleno absoluto en el Auditorio Municipal Maestro Padilla, una cuidada selección del repertorio y la participación de un dúo de pianistas de alto prestigio internacional, la china Xin Wang y el alemán Florian Koltun tocando a cuatro manos. Los músicos de la OUAL han hecho el resto, desarrollando con brillantez las partituras, de alto nivel técnico y gran complejidad interpretativa, bajo la dirección de Juan José Navarro.
Antes del inicio ha habido una breve introducción que María del Mar Ruiz ha dirigido a las personas asistentes, que han rozado el millar. La vicerrectora de Cultura y Sociedad ha querido poner en valor que “este concierto de Cursos de Verano de la Orquesta de la Universidad de Almería se ha convertido ya en un clásico dentro de la programación musical que diseñamos al principio de curso académico”, textualmente, añadiendo que “el programa de Cursos de Verano no solamente consiste en ofertar una propuesta de formación con temáticas de actualidad en entornos más relajados, donde se combinen exposiciones teóricas con una parte práctica”. De hecho, ha llamado la atención sobre que llevan “unos años intentando incentivar en la medida de lo posible que los cursos tengan más horas de práctica, con visitas guiadas a determinadas actividades, porque realmente es lo que los estudiantes demandan”.


Continuando con esa línea, también consideran Ruiz y su equipo que es “fundamental” ofertar “una programación cultural que acompañe al programa de Cursos de Verano”, en cuya convicción enmarcan “el gran evento de esa programación”, como es “este concierto”, sobre el que la vicerrectora ha hecho una valoración muy positiva en varios aspectos, como el respaldo social: “Levantó muchas expectativas ya desde el principio, repartimos más de 800 entradas y se ha quedado gente en la calle sin entrada, a pesar de que siempre, una vez que accede todo el público con entrada, intentamos dar cabida a aquellos interesados que no la tienen para que se coloquen en los palcos o en los pocos sitios que han quedado vacíos”. Efectivamente, “la respuesta ha sido muy positiva otra vez, y ya no solamente en cuanto al público, sino también en cuanto a la actitud que tenía el público y su respuesta ante la música”.
María del Mar Ruiz ha recordado que los músicos de la OUAL han interpretado con brillantez “tres piezas muy importantes de tres autores excelentes, Beethoven, Carl Czerny y Músorgski, y, como se ha podido ver, la respuesta por parte del público ha sido de un disfrute pleno del concierto”. Ha querido destacar a director e intérpretes: “Juanjo había puesto a sus músicos un desafío, el de tres piezas importantes, sobre todo el ‘Concierto para piano a cuatro manos y orquesta en Do mayor’, protagonizado además por estos dos pianistas invitamos, la china Xin Wang y el alemán Florian Koltun, y en la segunda parte ‘Cuadros de una exposición’, que ha sido un cierre brillantísimo antes del himno universitario, puesto que no podemos olvidar que tenemos una orquesta universitaria, es decir, tenemos que primar la parte formativa de los músicos y mostrar las habilidades que están adquiriendo en los conciertos”.
La vicerrectora se ha referido a una medida implantada hace ya unos años, “eliminar el papel del programa musical, no se da ese programa de mano, sino que se proyectan en pantalla los títulos de las piezas que se van a escuchar, medida para respetar y cuidar, en la medida de nuestras posibilidades, el medio ambiente, y mantener una política de ahorro de papel y de gasto de tinta”, como introducción a la importante novedad de esta edición: “La posibilidad de que diez personas del público pudieran estar en el escenario junto a los músicos, petición que se podía formular al reservar la entrada y que tardó solo unos minutos en verse completada, lo que ha sido una experiencia maravillosa para las personas afortunadas, que fueron las más rápidas en solicitarlo”. A su juicio, “estar en el escenario y escuchar a los músicos tan, tan de cerca, es algo inolvidable”.


Ha aprovechado Ruiz para recordar que “el próximo concierto que se está preparando es el de la gran final de la quinta edición del Concurso Internacional de Dirección de Orquesta”, para advertir desde ya a las personas interesadas en acudir de que deben estar atentas: “Este año va a ser en octubre y también con unas expectativas muy, muy elevadas, puesto que la respuesta de participantes ha superado bastante la previsión que teníamos en número y en procedencias”. Se ha mostrado segura de que volverá a ser un éxito de público, remarcando la satisfacción del concierto de este miércoles, en el ecuador del programa de Cursos de Verano, cumpliendo con ejes estratégicos: “Queremos que la universidad, junto a sus pilares fundamentales, que son la docencia y la investigación, sea capaz de aportar conocimiento, acercar las temáticas de actualidad a la sociedad, independientemente de la formación de cada una de las personas, y con actividades como los cursos de verano y con las actividades culturales estamos dando servicio a la comunidad no solamente universitaria, sino toda la ciudadanía; estamos al servicio de nuestro entorno y dando respuesta a sus inquietudes”.
Juan José Navarro ha reconocido que este “ha sido un concierto muy importante para la Orquesta de la Universidad y para mí como director”, textualmente: “Abordar una de las obras más importantes del repertorio sinfónico, ‘Cuadros de una Exposición’, siempre es un reto, y podemos estar orgullosos de haber realizado una buena interpretación”. Igualmente, ha definido como “una gran experiencia interpretar un concierto para piano a cuatro manos, formato de solista que no se realiza habitualmente”. A eso ha unido su satisfacción por “la respuesta del público, que llenando el Auditorio ha demostrado el cariño que tiene a la Orquesta y a la Universidad”. Por último, ha resaltado “el trabajo intenso que los músicos han hecho esto días, así como la gran labor que el Vicerrectorado de Cultura y Sociedad está haciendo por la música”.